El principio de derecho laboral es una rama del derecho, la cual tiene una serie de directrices jurídicas y principios que involucran todo lo que tenga referencia con las normativas laborales. Aunque también se les conoce como derecho del trabajo o derecho social.
Los principios del derecho laboral tienen como objeto la tutela de trabajo realizada bien sea de forma libre, por cuenta ajena o por relación de dependencia y que a cambio recibe una contraprestación. Los principios de derecho laboral son de carácter heterónomo y autónomo, es decir los que están sometidos a un poder y los que gozan de su autonomía, caracterizado por regular determinados tipos de trabajo como por ejemplo el dependiente o de relación laboral.
Principios del derecho laboral
Principio protector o tutelar
Este es el más importante de todos los principios del derecho laboral, pues tiene la gran función de hacer que se cumpla el ordenamiento jurídico laboral. Este principio se consideró partiendo de una desigualdad, por lo que fue creado con la finalidad de poder establecer un amparo o protección sobre los trabajadores. Debido a que es la parte más débil frente a los poderes de empleador.
En conclusión el principio protector busca dotar a trabajador de los elementos necesarios que compensen su situación, y de esta forma igualarla con la otra.
Principio de la irrenunciabilidad de los derechos laborales.
Este principio trata sobre la imposibilidad en el ámbito jurídico de privarse de manera voluntaria a los derechos y beneficios concedidos en la legislación laboral. Sí una persona decide renunciar a uno de estos derechos, no será aceptado, es decir que será anulado absolutamente su petición incluso si este determina que sea por un beneficio propio, pues no es permitido por ningún motivo privarse de ellos.
Principio de continuidad laboral
Este principio se enfoca principalmente al contrato de trabajo, pues por medio de este es como se establecen las relaciones jurídicas entre el trabajador y la empresa contratante. El principio de continuidad laboral busca que las relaciones laborales sean estables. Ademas que permitan asegurar la continuidad de permanencia del trabajador en la empresa protegiéndole de situaciones que pongan término a su contrato de trabajo.
Principio de supremacía de la realidad
El principio de supremacía de la realidad hace referencia a la importancia de la demostración de la realidad entre trabajador y empleador. Por lo tanto se debe hacer prevalecer las condiciones reales de trabajo sobre aquellas condiciones pactadas en un contrato o por mutuo acuerdo. De esta manera en casos de discordia entre lo que suceda en la práctica (trabajo) y lo que surge en documentos o acuerdos, se dará siempre la prioridad a la realidad, es decir la práctica pues es esta la que tiene efecto jurídico.
Un claro ejemplo de este principio se puede evidenciar en los contratos de trabajo, que muchas veces no se actualizan conforme a los cambios realizados, por eso los documentos y demás pierden validez.
Principio de razonabilidad
A diferencia de los otros, este principio establece la idea de lo razonable como un hecho fundamental. Que de hecho sirve como un criterio interpretativo indispensable para situaciones en las que por errores, simulación, confusión o fraude sea necesario determinar el alcance real de las clausulas y situaciones jurídicas que lo ameriten. De este modo se evita generar injusticias que no tenga ningún fundamento en lo que cabe de razonal.
Principio de buena fé
El principio de buena fé consiste básicamente en una presunción, es decir una sospecha sobre algo simplemente por tener indicios de ello. En este principio se supone que las relaciones y conductas entre trabajadores se perpetran de buena fé, aunque si alguna de las partes invoca la mala fe, este deberá demostrarla.